La creolina funciona como un desinfectante fenólico, conocido por su eficacia en la eliminación de bacterias, hongos y mohos, así como en la neutralización de olores fuertes, especialmente en áreas con presencia de animales.
Eliminación de olores:
La creolina puede ayudar a neutralizar olores desagradables, especialmente aquellos relacionados con orina de animales
USOS:
Desinfección de superficies:
La creolina se utiliza para limpiar y desinfectar pisos, baños, cocinas, y otras áreas propensas a la acumulación de gérmenes.
Aplicaciòn:
Diluir entre 10 ml y 120 ml de creolina por litro de agua.
Una vez diluida, la solución de creolina se puede aplicar con un paño, cepillo, esponja o rociador sobre la superficie a limpiar.
Se debe dejar que la solución de creolina actúe durante un tiempo específico, que suele ser de varios minutos (entre 5 y 30 minutos) y que puede variar dependiendo de la suciedad y del tipo de superficie.
Después del tiempo de actuación, se debe enjuagar la superficie con abundante agua limpia o, si es necesario, limpiar con un paño húmedo para retirar cualquier residuo.